Red de escritores en español

sábado, 31 de julio de 2010

La independiente




"La Independiente” es una feria en donde podrán encontrarse fanzines; cómics; libros de editoriales independientes; cuadernos para el artista; exposiciones; djs sets y música en vivo, en un espacio agradable, dándole lugar a la escritura, literatura, fotografía, cómics y pintura contracultural. Adecuando el sitio con exposiciones, y un espacio para que los comensales puedan sentarse a leer o dibujar, a comer y beber. Defendiendo el consumo de cultura independiente y autogestionada.

Es este domingo primero de agosto en el espacio cultural “Circo del Aire” en la localidad de San Telmo.Perú 856. A partir de las 15hs.
Los puestos serán exclusivamente para editoriales independientes, fanzines, materiales para artistas y fotografía.
“La Independiente” surge de una iniciativa de la editorial Bicicletista que trata de crear una gran fanzinoteca gratuita, para la cual se viene recolectado material tanto local como de países sudamericanos, especialmente de Perú, contando con este material para la venta y la exposición.

Están ustedes invitados,

Muchas gracias,

la calle es nuestra.

www.la-revista-bicicletista.blogspot.com

Y diez sin Favaloro



Ya hace una década de la partida de este genio del by pass. Cardiólogo que decidió apostar por el país y al ver que desde el aparato gubernamental/estatal se lo ignoraba o abandonaba a su suerte no le quedó otra que elegir el camino del suicidio.

Quizás si se hubiera ido al exterior se lo respetaría o trataría mejor. Pero acá en Argentina ya sabemos como funcionan muchas veces esas cosas.

Mientras tanto no faltan aquellos personajes mediáticos que saturan las pantallas de tv a toda hora, ganan fortunas y no hacen mas que discutir temas ridículos que no tienen ningún sentido. Que no dejan nada y muchas veces pasan al terreno de la grosería.


martes, 27 de julio de 2010

3 años sin Fontanarrosa




Hablando de fútbol, del Mundial, de historias y esas cosas hace poco se cumplieron 3 años de la muerte de Fontanarrosa. Tres años ya pasaron. Parece mentira lo rápido que pasa el tiempo.












martes, 20 de julio de 2010

En aquel pueblo.

En aquel pueblo.

En aquel pueblo las casas eran de chapa y material. Las veredas estaban todas rotas y llenas de basura. Sobre ellas dormía una importante cantidad de personas. Por las calles llenas de tierra y charcos con aguas servidas pasaban constantemente policias armados para vigilar la zona.
Los niños casi siempre estaban dentro de sus casas. Ya que no había escuelas, clubes, negocios, cines, centros culturales o espacios verdes. Solo les quedaba encerrarse a ver televisión. Además muchos eran obligados a trabajar desde temprana edad.
Cierto día, a eso de la una de la mañana, todos los pobladores de aquella aldea se despertaron sobresaltados. Escucharon golpes en las puertas de sus viviendas. Salieron a fijarse y vieron que se trataba de un grupo de jóvenes. Quienes los invitaron a una fiesta que se desarrollaba en una fábrica ubicada en las afueras y que había quedado abandonada hacía varios años.
Al principio todos estos tenían miedo de ir. Les resultaba bastante extraña esa invitación. No sabían de que se trataba, por que la hacían en ese horario o los motivos por los cuales no la habían anunciado anteriormente en ningún lado. Pero finalmente y mas que nada por curiosidad optaron por ir. Muchos de ellos lo hacían con armas para intentar defenderse en caso de que ocurra algún hecho desagradable.
Al llegar descubrieron que esa fábrica que estaba abandonada, con sus paredes descascaradas y cubiertas de hongos, ahora se hallaba totalmente remodelada. Pintada de atractivos colores, con plantas y flores en la entrada y llena de lamparitas amarillentas que colgaban del techo e iluminaban todo el ambiente.
Allí en la planta baja había personas que leían cuentos y realizaban juegos para los mas chicos, algunos que se vestían de payasos que brindaban teatro a la gorra, otros que hacían música en un rincón e invitaban a la gente a sumarse a cantar. Mientras que en el primer piso había un grupo de bailarines que hacían diferentes danzas en un gigantesco escenario de madera. Y en el tercero había puestos que ofrecían libros, cuadros y artesanías.
Hasta que alrededor de las cinco de la mañana se dió por terminada la fiesta y los encargados saludaron al público agradeciendo su presencia. Luego empezaron a cargar todo lo que habían traido en varios micros. Y pasados varios minutos ya se marcharon del pueblo.
Al día siguiente varios pobladores se dirigieron a esa fábrica. Solo encontraron afiches pegados en las paredes que explicaban que aquel era un grupo de jóvenes artistas, muchos todavía estudiantes, que no vivían en un lugar fijo. Sino que se la pasaban recorriendo pueblos a traves de micros que alquilaban. Lo hacían un poco por diversión y otro tanto para llevar alegría a la gente que tiene problemas. Y lo hacían así sorpresivamente para mantenerse en el anonimato.
Después de varias semanas la vida en ese pueblo volvió a ser la misma de siempre. Sin ningún otro episodio que la altere o convoque masivamente a todos sus habitantes. Con la diferencia de que esa fábrica ya no estaba. Había sido demolida por las fuerzas de seguridad para evitar que alguien pudiera alojarse allí. Menos aún intentar hacer algo distinto como lo ocurrido aquella noche o pretender cambiar las cosas.

miércoles, 14 de julio de 2010

Ley de matrimonio y otras hierbas

Y hoy se cumplen 221 años de la Revolución Francesa, de la Toma de la Bastilla, lo que mas tarde dió origen a la Declaración de los derechos del hombre.
http://www.fmmeducacion.com.ar/Historia/Documentoshist/1789derechos.htm













Cuadro de la Toma de la Bastilla






Pensar que tantas personas murieron en el mundo a lo largo de los siglos luchando por mejorar la calidad de vida de la gente, hacer una sociedad igualitaria, donde todos tuvieran los mismos derechos.


Mientras tanto acá en Buenos Aires, en el día de hoy, en pleno siglo XXI, se discute si se aprueba o no la Ley de Matrimonio entre personas del mismo sexo.

Ojalá salga esa Ley. Sería como dar un paso adelante, subir un escalón, enriquecer la Democracia.

El que es católico practicante puede seguir haciendo su normal ritmo de vida. Nadie le va a decir nada. Pero el que no, el que piensa lo contrario o no está de acuerdo con la cúpula de la Iglesia no tiene por que andar soportando las órdenes que esta le impone.

Además cada uno es dueño de su cuerpo. Y en la intimidad puede hacer con él lo que quiere o mas le haga feliz mientras no afecte a nadie. Las religiones no tienen por que interferir.





sábado, 10 de julio de 2010

Actuales problemas sociales

Xenofobia” en Sudáfrica: ¡socialismo o barbarie!
Fred Weston
venezuela.elmilitante.org

Según el CIA Factbook

:"Sudáfrica es un mercado emergente de ingresos medios con abundante suministro de recursos naturales, sectores financiero, legal, comunicaciones, energético y de transporte bien desarrollados; una bolsa que es la diecisieteava más grande del mundo; una infraestructura moderna que apoya una distribución eficiente de mercancías a los centros urbanos de toda la región. El crecimiento ha sido fuerte desde 2004, Sudáfrica ha cosechado los beneficios de la estabilidad macroeconómica y el boom global de las mercancías".
¿Cómo explicar entonces el hecho de que Sudáfrica haya presenciado durante estos últimos días unas escenas bárbaras con el asesinato, según los medios de comunicación por lo menos 22, brutal de inmigrantes? Algunos han sido matados a machetazos y otros quemados vivos. Debido a estos actos, unas 6.000 personas han huido de sus desvencijadas casas.
Los ataques más recientes contra los inmigrantes comenzaron hace más de una semana en la ciudad de Alexandra, al norte de Johannesburgo, y después de extendieron al centro de la ciudad y por toda la región de Gauteng. El centro de Johannesburgo parecía un campo de batalla, la policía tuvo que utilizar gas lacrimógeno y balas de goma para dispersar a la furiosa muchedumbre.
Las entusiastas palabras de la CIA son sólo la introducción inicial a la situación en Sudáfrica. La realidad es que en el país existe una enorme polarización, con una inmensa riqueza concentrada en manos de unos pocos y una gran parte de la población que vive en la pobreza. Las últimas cifras de desempleo demuestran que está ¡próximo al 30 por ciento! Él 50 por ciento de la población vive por debajo del umbral de pobreza. El 10 por ciento más pobre de la población sólo recibe un 1,4 por ciento de la renta nacional, mientras que el 10 por ciento más rico consume el 44,7 por ciento, el índice Gini, que mide la disparidad de ingresos está en el 65. Siempre que este índice pasa de 40 se considera una situación de desestabilización.
Los recientes acontecimientos en Sudáfrica confirman esta conclusión. La inmensa presión que sufre una gran parte de la población es la consecuencia de la reciente barbarie. La tragedia es que muchos de los que han caído víctimas de esta violencia proceden de Zimbawe. Se cree que unos 3.000 zimbabuenses cruzan diariamente a Sudáfrica en busca de trabajo. Son los más pobres que abandonan su país para escapar la terrible pobreza, que es el resultado de la política económica del régimen de Mugabe.
Estas personas van a Sudáfrica porque es un país relativamente más desarrollado que Zimbawe. El "boom" sudafricano ha atraído a inmigrantes de muchas zonas del África negra. El gobierno sudafricano ha situado a personal militar en la frontera con Zimbawe para intentar detener esta marea humana empobrecida, los miles de zimbabuenses que cruzan al país, pero es una tarea imposible porque es mucha la desesperación de estos pobres. Además del gran número de zimbabuenses, también hay 33.000 refugiados y solicitantes de asilo procedentes de la República Democrática del Congo, 20.000 de Somalia, 6.500 de Burundi y 26.000 de otros países africanos.
Aunque Sudáfrica realmente está más desarrollada que el resto del África negra, aún tiene enorme problemas sociales propios. Sudáfrica tiene 49 millones de habitantes, pero además tiene una población inmigrante que está entre los 3 y los 5 millones de personas, mayoritariamente de Zimbawe, Mozambique y Nigeria, lo que supone una enorme presión en un país donde el desempleo ya es muy elevado. Se calcula que aproximadamente 7,5 millones de sudafricanos no tienen acceso a una vivienda adecuada. En Johannesburgo, una ciudad moderna, hay 200.000 chabolas donde se ven obligados a vivir los negros más pobres. Muchos ganan sólo 35 dólares mensuales. Además está el VIH que ha afectado seriamente a un sector importante de la población, principalmente a las capas más pobres, y el crimen se está extendiendo.
En este contexto, los inmigrantes se han convertido en un chivo expiatorio de todos los problemas sociales que afligen a este país. Como es habitual, son las capas más pobres las que se sienten más amenazadas. No son capaces de ver quién es el culpable de la situación creada tras la caída del régimen de apartheid. Las masas lucharon para acabar con el apartheid con la esperanza de tener mejoras reales en sus condiciones de vida. En cambio, lo que han visto es una pequeña minoría de negros que han ascendido socialmente, absorbidos por la sociedad capitalista, mientras que la aplastante mayoría están en el fondo luchando por sobrevivir en unas condiciones terribles.
Esperaban que el final del apartheid produjera un cambio real. Pero estas esperanzas se evaporaron debido a la política de la dirección del ANC que adoptó la perspectiva de la clase capitalista. Su política económica está adecuada a las necesidades del capitalismo, no a las necesidades de las masas. La política económica del gobierno sudafricano sigue la misma línea que la aplicada por todos los países capitalistas, con privatizaciones, recortes del gasto público y otras medidas similares.
En medio de toda esta situación vemos los inicios del colapso de las infraestructuras debido a la falta de inversión. El año pasado Sudáfrica comenzó a experimentar lo mismo que desde hace años sufre el África negra, la escasez de electricidad. El estado es propietario de la empresa de suministro eléctrico Eskom con unas centrales muy antiguas incapaces de satisfacer la demanda, por esa razón se han visto obligados a aplicar cortes periódicos de electricidad. Un transporte público adecuado es otro problema que sigue sin solucionarse.
Thabo Mbeki es un ejemplo particularmente podrido del nuevo tipo de dirigente que ha aparecido. Incluso llegó a apoyar a Mugabe ignorando el verdadero drama que se estaba desarrollando en Zimbawe. Sin embargo, la dirección del ANC y los sindicatos sudafricanos han pedido que Mbeki adopte una línea más enérgica hacia Mugabe. Lo que no está claro es cuál debería ser esa línea.
El problema en Zimbawe es que Mugabe durante años aplicó una política similar a la adoptada en Sudáfrica, complemente en la línea de los dictados del imperialismo. ¡Y el programa del MDC también es el dictado por las necesidades del imperialismo!
Los dirigentes del ANC y de los sindicatos están preocupados ante la posibilidad que la crisis que vive Zimbawe pueda arrastrar a Sudáfrica, algo que realmente empieza a suceder.
La economía sudafricana ahora sufre la tensión de la crisis económica mundial. Si los conflictos sociales actuales han estallado cuando la economía todavía está en "auge" no es difícil imaginar el escenario que vivirá Sudáfrica ante el impacto de la crisis mundial del capitalismo. Será una pesadilla inimaginable.
Según algunos informes estos últimos ataques no sólo han ido dirigidos contra los inmigrantes, también contra algunos grupos étnicos sudafricanos que también comienzan a sentir la presión. Es una inquietante amenaza para el movimiento obrero sudafricano. Mientras el desempleo y la pobreza acechen esta zona es sólo cuestión de tiempo ver más de estos ataques racistas y étnicos.
El Primero de Mayo, los dirigentes del ANC pidieron a la gente que trabajaban juntos para combatir la "xenofobia". Pero esta xenofobia no es un fenómeno inexplicable que ha estallado desde ninguna parte. Las soluciones a los problemas de los pobres sudafricanos no se encuentran bajo el capitalismo. La política económica capitalista creará aún mayores niveles de pobreza que los actuales. En algunas de las zonas más pobres del país se sienten el hambre, no tienen futuro y están desesperados.
O el movimiento obrero muestra una salida a la crisis o los pobres buscarán lo que parece la solución más fácil, atacar a los "extranjeros que roban nuestros empleos". Sudáfrica tiene el potencial de alimentar y vestir a toda su población, de garantizar una vivienda decente y empleos para todos. Pero para que eso ocurra, los recursos del país deben ser arrebatados de las manos de una pequeña minoría de capitalistas, más o menos esa misma camarilla que en el pasado impuso el odiado régimen de apartheid contra la población.El movimiento obrero sudafricano tiene una tradición gloriosa de lucha de clases, solidaridad e internacionalismo. Hace poco vimos a los estibadores negarse a descargar barcos chinos con armas destinadas a Zimbawe. Esa es la verdadera cara de los trabajadores sudafricanos, la cara de los trabajadores que defienden a sus hermanas y hermanos de Zimbawe.
Ese pequeño ejemplo demuestra que la clase obrera sudafricana es la única clase que puede dirigir a las masas en la dirección correcta, hacia la unidad de todos los pobres, de todos los trabajadores por encima de las fronteras nacionales, contra la clase capitalista que es la fuente de estos problemas.
El año pasado hubo una oleada de huelgas en Sudáfrica contra el gobierno del ANC. Miles de trabajadores del sector público participaron en ellas. Una de las cuestiones que impulsó este movimiento fue el despido de 600 trabajadores de la sanidad. Los trabajadores pedían un 12 por ciento de aumento salarial mientras que el gobierno sólo ofrecía un 7,25 por ciento. Hubo mítines grandes en todo el país, incluso apoyaron la huelga los conductores de taxis, autobuses y trenes. El presidente Thabo Mbeki se posicionó en contra de los huelguistas y el gobierno dijo que estaba dispuesto a utilizar a los soldados para proteger a los esquiroles.
Esa huelga demostró la fuerza del movimiento obrero sudafricano. Si los dirigentes del movimiento obrero sudafricano hubieran querido, habrían podido movilizar las fuerzas de este movimiento para luchar por la transformación de la sociedad. Si no lo hacen, entonces veremos repetirse estas escenas de barbarie. Muchos trabajadores se deben estar preguntando que pueden hacer.
La situación actual es el resultado directo de la política adoptada por la dirección del ANC desde la caída del apartheid. El final del apartheid no fue suficiente. Lo que hacía falta era poner fin al sistema social y económico en el que se basaba el apartheid, el sistema capitalista. Las masas no lucharon ni hicieron grandes sacrificios simplemente para permitir que una minoría de negros se convirtiera en burgueses. Lucharon por la justicia social, pero los dirigentes del ANC han fallado.
La tarea es construir una corriente marxista incrustada dentro del movimiento obrero sudafricano que pueda explicar pacientemente todo esto a los trabajadores y jóvenes. La tarea es ganar a las organizaciones de masas de los trabajadores sudafricanos a la causa de la emancipación de la clase obrera. La elección es escueta. Los recientes acontecimientos confirman lo que hemos dicho en muchas ocasiones: la alternativa hoy es entre barbarie y socialismo.

http://www.rebelion.org/noticia.php?id=67905

Otra cara del Mundial

El Mundial opaca la pobreza en Sudáfrica

Por: Tanishka Colón
De: Diálogo

La incesante euforia de la Copa Mundial, celebrada en Sudáfrica, reúne alrededor de un billón de espectadores y fanáticos del “juego de la vida”. Muchos se enganchan a la expectativa de qué selección pasará a los octavos de final y quién –más adelante- será campeón del mundo. Entre tanto unos se hinchan con los goles anotados, o se mantienen al borde de su asiento con los otros casi cercanos, los llamados moradores de casuchas (en inglés, shack dwellers) batallan para no quedarse en la calle.
Esta fiebre futbolística ha opacado la cruda realidad de Sudáfrica. En las ciudades de Durban, Johannesburg y Cape Town miles de moradores de casuchas han sido perseguidos y sacados de sus viviendas por gangas, al tiempo que algunos han sido arrestados y procesados sin propiamente haberse celebrado un juicio. Es por esto que han creado una campaña llamada “Upside Down World Cup” (Copa Mundial al revés), la cual pretende captar la atención respecto a su lucha.
La organización responsable de esta campaña se llama “Abahlali baseMjondolo”, lo que significa “personas que viven en casuchas”. En el portal Democracy Now, entrevistaron a Raj Patel, un visitante escolar en el Centro de Estudios Africanos en UC Berkeley, quien es investigador honorario en la Universidad de KwaZulu-Natal en Durban. Éste habló sobre la organización y sobre la situación actual en el país. “La razón por la cual es una organización interesante es porque cuando vemos toda la emoción alrededor de la Copa Mundial, es importante recordar que la Copa Mundial no es un bien genuino”, comentó Patel.
Esto se debe a que, no todo el mundo en Sudáfrica se está beneficiando del Mundial. Este investigador explicó que la FIFA se encargó de embellecer a este país, junto con su Gobierno, y hacerlo más fútbol amistoso, arreglándolo a su conveniencia. “Claro, yo no creo que sea una idea terrible”. Patel añade que, cuando eventos deportivos como estos ocurren en el Sur Global, “usualmente existen unas coartadas para algunas corporaciones y unas cuantas personas que obtienen un beneficio masivo, y los gobiernos participan en lo que ellos llaman embellecer, pero correctamente sería la privatización y aburguesamiento”.
Además, critica los subsidios de billones de dólares que se le ha dado a la FIFA por parte del gobierno sudafricano. Ya que, mientras los medios de comunicación se enfocan en los partidos y en qué selecciones van adelantándose un paso más a la final, vemos cómo los pobres son excluidos de esta gran celebración.
Cerca de los lugares donde se celebran los distintos encuentros de los equipos, pescadores y vendedores independientes han sido removidos de sus usuales puestos hasta que acabe el Mundial. A esto se le llama “la zona de exclusión”. En ésta los moradores de casuchas no pueden entrar y si son vistos allí podrán ser arrestados, como ha ocurrido en Cape Town. En Durban, muchos de los que han sido sacados de sus hogares están tratando de regresar.
Organizaciones como Abahlali se encargan de proveer cuidado a este sector, brindando cuidado a niños y estableciendo centros para pacientes de VIH y SIDA. Esta organización, en especial, quiere que los medios de comunicación presten más atención a este asunto porque luego del Mundial -después del último silbido del árbitro- no se sabe qué vaya a pasar con este país, dijo Patel.
Lo más que indigna es que, mientras 32 países batallan por llegar primer lugar en la Copa Mundial, miles de personas sufren por no tener un techo seguro ni por tener la seguridad de qué vaya a ocurrir en el mañana. Para la preparación de este evento mundial, alrededor de $6 billones fueron invertidos en construcción y remodelación de estadios. Este dinero el gobierno prefirió invertirlo en infraestructura y dejar otros proyectos pendientes –que deberían tener prioridad-. Patel explicó que este dinero pudo haber sido utilizado para viviendas, educación y para la salud. Sin embargo, “este dinero se utilizó para estos estadios, que probablemente quedarán olvidados y se deteriorarán luego de terminar el Mundial”.

Se juegan la vida por el Fútbol

Por otro lado, la Copa Mundial pone en juego la vida de los somalíes que quieran contagiarse con esta fiebre. Y es que, “organizaciones islamistas, que controlan gran parte del país, declararon que el campeonato atenta contra el Islam y amenazaron con duras represalias para quienes lo miren”, reseñó el portal IPS Noticias.
El portavoz de Hizbul-Islam, jeque Mohammad Abdi Aros, advirtió a los jóvenes a través de la cadena británica BBC “que no se atrevan a mirar los partidos de la Copa Mundial”. Según él, es una pérdida de dinero y de tiempo. No les servirá de nada ni obtendrán ninguna experiencia de ver locos saltando de arriba a abajo".
Pero esto no se ha quedado en simples amenazas. Dos personas que miraban un partido en su casa de Mogadiscio fueron asesinadas por hombres armados. Además, Hizbul-Islam detuvo a diez personas que veían el partido de Argentina contra Nigeria.
A pesar de la oposición islámica, Somalia es un país de fanáticos. Los casi 20 años de guerra civil no impiden que se siga mirando y jugando al fútbol. Allí es común ver jóvenes jugando en zonas desiertas de la capital, mientras hay combates en otras partes.
Shafii Mohyadeen, el portavoz de la Federación de Fútbol Somalí, dijo a IPS Noticias que "nada nos impedirá jugar al fútbol".
Para este joven el fútbol ha cambiado la vida de muchos, incluso hay niños que han decidido dejar las armas y cambiar la violencia por el fútbol. De igual forma, este deporte ha logrado un cambio positivo. "Nuestra situación es muy difícil, pero creemos que el fútbol puede desempeñar un papel importante para lograr la paz y la estabilidad”, concluyó Mohyadeen. http://dialogodigital.com/es/debate-mediatico/2010/06/mundial-opaca-pobreza-sudafrica