Ya que tenemos el mundial de futbol en Brasil aca van algunos datos:
Geografía
Brasil es el mayor país de América Latina; su territorio ocupa casi la mitad del continente sudamericano (47,3%), con una superficie de 8.511.965 kilómetros cuadrados y es el quinto país en tamaño del mundo, después de Rusia, Canadá, China y los EUA de América.El ancho máximo de Brasil, 4.319,4 kilómetros, es casi igual a la mayor distancia entre el norte y el sur del país, es decir, 4.394,7 kilómetros.
Brasil limita con la Guayana Francesa, Surinam, Guyana, Venezuela y Colombia, al norte; Uruguay y Argentina, al sur; Paraguay, Bolivia y Perú, al oeste. Ecuador y Chile son los dos únicos países de Sudamérica continental que no comparten límites con él. Toda la costa marítima de 7.367 kilómetros está bañada por el Océano Atlántico.
Hidrografía
Brasil cuenta con uno de los mayores sistemas fluviales del mundo, compuesto por ocho cuencas hidrográficas. Las del Amazonas y de Tocantins-Araguaia (en el norte) representan el 56% del total del área hidrográfica del territorio. El río Amazonas es el más grande del mundo en volumen de agua y segundo en longitud -después del Nilo-, con 6.577 kilómetros de longitud, de los cuales 3.615 kilómetros se encuentran en territorio brasileño.SU POBLACIÓN
Según el censo poblacional realizado en 2000, Brasil cuenta con 169.544.443 habitantes. La población brasileña es predominantemente joven ya que el 60% de sus habitantes están por debajo de los 29 años de edad.SU HISTORIA
En los siglos XV y XVI, Portugal, un reino ibérico con escaso millón de habitantes, estaba cercado por el Océano Atlántico al frente, y una Castilla cuyo reino le era hostil, en la retaguardia. Luego de años de luchas contra la ocupación de los moros, los portugueses dirigieron su atención y energía hacia el mar y la navegación. Mientras los españoles partieron en busca de una ruta a Oriente viajando hacia el oeste, los portugueses optaron por el llamado Ciclo del Sur bajando por la costa de África.
Luego de pasar el Cabo de Buena Esperanza en 1487, fueron guiados por el navegante Vasco da Gama a través del Océano Indico, y descubrieron la ruta marítima hacia el Lejano Oriente en 1497. Estos navegantes conocían la existencia de tierras al otro lado del Atlántico y ya habían realizado diversas expediciones hacia el oeste antes de que Colón descubriera las Antillas en 1492, pero habían ocultado la información para anticiparse a las ambiciones de España, Inglaterra y Francia. Para una nación pequeña, mantener el secreto era el único método disponible para salvaguardar las recompensas de expediciones audaces y exitosas de la explotación de otros rivales más poderosos.
El Tratado de Tordesillas (1494) planteó más tarde la cuestión de la posesión de las nuevas tierras entre España y Portugal. Se acordó que los territorios ubicados al este del meridiano que pasa a 370 leguas al oeste de las Islas de Cabo Verde pertenecían a Portugal, y las tierras al oeste del meridiano quedaban para España. Esta línea imaginaria, de polo a polo, dividía la parte oriental del continente sudamericano y constituyó la primera frontera de Brasil, si bien su descubrimiento formal por parte de Pedro Álvares Cabral no ocurrió sino hasta seis años más tarde, en 1500.
El Traslado de la Corte Portuguesa a Brasil (1808-1821)
En 1808, mientras los ejércitos de Napoleón comenzaron a invadir Portugal, se tomó la decisión de trasladar al monarca y su corte a Río de Janeiro para preservar la integridad física de sus miembros; permanecerían en Brasil hasta 1821. El establecimiento de la administración real en la colonia por un período de 14 años aceleraría el camino hacia la independencia, pero a partir de ese momento, bajo una única voz. La Corona portuguesa, conscientemente o no, tomó algunas medidas que facilitaron la transición hacia la independencia. La elevación de Brasil, en 1815, del status de colonia al de Sede del Reino Unido de Brasil, Portugal y Algarves (territorios del reino en África) puede ser considerado como un ejemplo.Otro fue que, si bien la dominación de Napoleón finalizó en 1815, el entonces Príncipe Regente (coronado D. Juan VI en 1818) prefirió permanecer en Río de Janeiro, aunque seis años más tarde, en 1821, debió rendirse a las presiones implacables de los políticos de Portugal y retornar a Lisboa. Dejó a su heredero en Río con el título de Príncipe Regente. Más aún, en presencia de miembros de la sociedad colonial, el Rey supuestamente le aconsejó: "Pedro, hijo mío, cuando llegue el momento, coloca la corona en tu cabeza antes de que un aventurero se la ponga".
La Proclamación de la Independencia (1822)
La irritante posición de los políticos de Lisboa ante este estado de cosas y los halagos de sus más cercanos consejeros brasileños, atrajeron al joven príncipe a la causa de la independencia. A poco menos de un año desde que su padre había vuelto a Portugal, el 7 de septiembre de 1822, el Príncipe Heredero proclamó la Independencia de Brasil y se coronó solemnemente como Emperador Pedro I, el 1º de diciembre de ese mismo año. El ideólogo más importante de la Independencia brasileña fue José Bonifácio de Andrade e Silva.Mientras que las colonias españolas en América lucharon ferozmente por su Independencia (luego terminarían siendo 18 repúblicas), Portugal y Brasil resolvieron el asunto por medio de negociaciones, luego de una breve guerra de Independencia (1822-1823). Brasil se constituyó entonces como Imperio bajo el mando de Don Pedro I quien continuó siendo el heredero al trono portugués